AFTERLIVES. Abdulrazak Gurnah. Bloomsbury. London, 2021 (2020). 290 pp.
Esta novela traza la historia de Tanzania en las primeras seis décadas del siglo XX, a través de las vidas de cinco personajes principales y la gente que los rodea. En términos históricos, los grandes hitos son el brutal colonialismo alemán, la devastación de la IGM, la ocupación inglesa, mucho más benigna, y la independencia. Los personajes son musulmanes (unos devotos, otros superficialmente), y son nativos, gujaratis, o mezcla de ambos. Khalifa es uno de éstos, hijo de un gujarati, administrador de una hacienda, y una negra local; él mismo parece nativo. Mientras los alemanes reprimen brutalmente las rebeliones tribales, Khalifa estudia cinco años con un tutor privado (en el innombrado puerto donde se desarrolla mayormente la acción); luego trabaja once más con unos banqueros gujaratis y finalmente pasa a emplearse con Amur Biashara, un comerciante corrupto y misterioso.
Cuando sus padres mueren, Khalifa recibe la oferta de casarse con Asha, sobrina huérfana de Amur, a cuya casa se muda. La chica es fanática religiosa e infeliz con el matrimonio, a pesar de que Khalifa es complaciente y dócil, o quizás por eso, pues es ambiciosa mientras él es conformista. Resulta que Amur es mucho menos rico de lo que parecía, y su hijo carpintero Nassor hereda lo que resta de su fortuna, incluyendo la casa de la pareja. Asha odia a su primo, que mantiene a Khalifa en su puesto, aunque lo desprecia e ignora. La pareja no tiene hijos, para frustración de ella.
En el puerto aparece Ilyas, un chico de origen desconocido que llega a trabajar en una plantación alemana. Con el tiempo sabremos que fue entregado por sus padres en pago de una deuda. Tras años de esclavitud, escapa y es recogido por un alemán de las montañas, que le da educación luterana y luego su empleo. En agradecimiento, Ilyas se vuelve ardiente germanófilo. Tras hacerse amigo de Khalifa, éste lo convence de buscar a sus padres, pero éstos han muerto en la miseria en su aldea. Enterado de que tiene una hermana mucho menor, la encuentra “adoptada” por unos vecinos que la maltratan.
Ilyas rescata a su hermanita y la lleva a vivir con él; serán los años más felices de ambos. Pero cuando estalla la Primera Guerra Mundial, Ilyas se alista como voluntario con los alemanes, y lleva a Afriya de regreso con sus “tíos”, dejando instrucciones de pedir ayuda a Khalifa si tiene algún problema. Cuando el “tío” descubre que la niña sabe leer y escribir, la golpea salvajemente y le fractura una mano. La valiente Afriya pide ayuda y Khalifa la rescata y se la lleva a vivir con él y Asha, quienes la adoptan de facto, la educan y la tratan bien.
El foco de la novela se desplaza a Hamza, otro fugitivo alistado con los alemanes. Esta sección describe el brutal entrenamiento militar y la manera en que un comandante alemán homosexual se enamora de él y lo hace su asistente personal. Cuando comienza la guerra, Hamza pasa dos años de penurias, terror y miseria en la larga retirada al sur. Al final de la guerra, un demente militar alemán casi lo mata a machetazos; Hamza pasa un par de años convaleciendo en una misión alemana, donde completa su aprendizaje del idioma. Un libro de Schiller será luego importante en su vida.
Mientras tanto, Afriya ha crecido y es ahora una atractiva adolescente. La cada vez más amargada Asha le toma celos y busca casarla, sin éxito. En 1921, Hamza llega al puerto, cojo y en la miseria, pero encuentra trabajo en el almacén y luego en la carpintería de Nassor, donde se hace amigo de Khalifa, quien lo aloja en un cuarto separado de su casa, para berrinche de Asha. Khalifa, ya mayor, es como un padre indulgente: “Hamza llegó a pensar que Khalifa era una especie de chivo expiatorio de crímenes ajenos, alguien que asumía la responsabilidad por los problemas de otros y por las calamidades de su tiempo”.
Conocemos luego la triste historia de Hamza y el desarrollo de su relación con Khalifa, Asha, Afriya, Nassor y los otros empleados de éste. Es todo un relato de la vida cotidiana, conforme el dominio inglés va trayendo prosperidad y paz tras las miserias de la guerra. Nassor se convierte en un magnate y la familia de Khalifa prospera con él. A fines de los años veinte y en la siguiente década, la novela se enfoca en el pequeño Ilyas, hijo de Hamza y Afriya, quien sufre alucinaciones y parece estar poseído por el espíritu de su tío homónimo, del que no se ha vuelto a saber nada. La búsqueda de su paradero ocupará varios años de la vida del chico, en medio de las transformaciones de la Segunda Guerra y la descolonización.
Es una novela hermosa, disfrutable y bien escrita en frases breves y directas, con pocos detalles descriptivos, pero aun así vívida y colorida, llena de personajes atractivos, con una prosa versátil en su sobriedad. Es, además del relato de unas vidas comunes, pero intensas y variadas, una historia nacional desde la perspectiva particular de los habitantes.