FIFTH BUSINESS. Robertson Davies. En The Deptford Trilogy. Penguin. New York, 2020 (1970). 270 pp.
La Trilogía de Deptford es una de las principales obras de la narrativa canadiense, y su autor un personaje peculiar y conspicuo de la cultura de ese país en el siglo XX. Este primer volumen le hace justicia, con creces, a su reputación, por el genio de la voz narrativa, el desarrollo de personajes, la rocambolesca trama y su originalidad. En el teatro popular, fifth business se llama al papel que no es de héroe, heroína, villano o confidente, pero que es indispensable para el desenlace. Es un papel crucial, pero no glorioso. Es así como describe su rol en la vida el narrador, Dunny Ramsay (como se ve después, es la empresaria teatral Liesl quien lo califica así por primera vez). La novela es en realidad un reporte dirigido al director de la universidad de donde ahora se retira, a los 71 años y tras 45 de servicio, como director del departamento de Historia, y es respuesta a una nota titulada College Chronicle, en la que un colega, aunque elogiosamente, lo pinta como obsoleto y omite sus muchos logros, como sus condecoraciones, exitosos libros y prestigio internacional.
Ramsay comienza describiendo el acontecimiento central de su infancia y juventud. A los diez años pelea con su amigo-enemigo Boy Staunton. Cuando éste le lanza una piedra envuelta en nieve, Dunny se esconde tras la Sra. Dempster, esposa del pastor bautista. La señora (de 20 años) recibe el golpe en la nuca, da a luz prematuramente y pierde la razón. La culpa por este hecho lo ligará de por vida a la infortunada mujer. Describe luego Deptford, su pueblo natal en Ontario, de 500 habitantes, con cinco iglesias en perpetua pugna: anglicana, católica, bautista, metodista y presbiteriana. Dunny narra su infancia, rechazando las visiones idílica y sórdida de los pueblos pequeños, que se alternan según la moda. Dunny crece en ese estrecho mundo y la novela hace un retrato quirúrgico, tragicómico, de su política, clases sociales, costumbres y acontecimientos. El final de su adolescencia está marcado por su secreto, la desgracia pública de la Sra. Dempster, la muerte de su hermano mayor y la rivalidad con Boy. El pequeño hijo de los Dempster, Paul, será luego un personaje central.
Al comenzar la Primera Guerra Mundial, Dunny se alista en el ejército. En Francia es herido por un obús, y meses después despierta en un hospital de Inglaterra, sin una pierna. Regresa a Deptford y es homenajeado como héroe. Boy se prepara para casarse con Leola (supuestamente prometida de Dunny), sus padres han muerto y no tiene nada que hacer en Deptford, por lo que ingresa como profesor en Toronto.
El resto de su vida monótona de profesor solterón está marcada por su fama como especialista en historia de los santos y sus viajes por Europa para investigarla. En uno de esos viajes, en el Tirol, encuentra a un personaje de su pasado que le cambia la vida, y conoce al padre Blazón, luego su guía intelectual y espiritual. Este Blazón es otro personaje magnífico, un cura sabio, sensato y epicúreo. Gracias a Boy, con el cual mantiene su complejísima relación, alcanza la tranquilidad financiera. Los líos de Boy y Leola, mientras aquél asciende a ministro durante la Segunda Guerra, van perfilando el misterio central de la trilogía: cuentas pendientes, arrogancia y fama.
Tras la guerra, Dunny se va a México para investigar la historia de la Virgen de Guadalupe. Ahí conoce a una compañía que va por el mundo montando el maravilloso espectáculo del mago Eisengrim (el personaje del Tirol). La socia de Eisengrim es Liesl, una suiza muy fea que se enamora de él y lo contrata para que escriba la biografía (falsa) del mago. Dunny pasa meses en la capital mexicana, compartiendo las peripecias de la compañía e impulsando al mago a la celebridad universal. Años después, en un reencuentro en Toronto entre Dunny, Boy y Eisengrim, habrá una dolorosa y difícil conversación. Minutos después ocurrirá el crimen o accidente crucial.
Es imposible, en unas cuantas líneas, dar una idea de la enorme riqueza que encierra esta novela no muy extensa. Es un retrato excelente de una parte de la sociedad canadiense a lo largo del siglo, una novela de misterio, costumbrista, bélica, cómica, picaresca y social. La exuberancia de personajes y tramas; los cambios de escenario, tono y ritmo; el atractivo de las situaciones y diálogos y, sobre todo, el personaje del narrador, su lenguaje y reflexiones, hacen que la lectura sea adictiva y las sorpresas constantes.
3 respuestas
Disfruté mucho este texto. Además me trajo recuerdos, ya que de 1990 a 1993 viví en Toronto, en el mismo conjunto que Robertson Davis. Platiqué varias veces con él. Como dato curioso, mis hijas lo llamaban Santa Clos.
En una ocasión, se realizó un debate entre él y -nada menos que- Carlos Fuentes, en la Universidad de Toronto. Un gran evento, memorable, Memo. Gracias.
Me gusto mucho la idea de estudiar a la Virgen de Guadalupe en Mexico algo que los jesuitas han hecho con sistemas tecnológicos para investigar el Ayate de Juan Diego
Pero pasa por lo del mago en el Tyrol y hay relatos sobre ello en Viena
Es una novela como un kaleidoscopio con vidrios de colores muy interesante narrativa
Un resumen estupendo de la novela de Davies, titulada en español : El quinto en discordia. Este autor siempre ha sido uno de mis favoritos y creo que tiene una estructura literaria perfecta porque es circular, empieza y termina con el incidente de la bola de nieve. No diré más para no desvelar sorpresas. Con Robertson Davies el disfrute literario está garantizado. Gracias por la reseña.