Un verdadero influencer: Aristóteles, de Ingemar Düring.

Lugar en donde estuvo del Liceo de Aristóteles. Wikipedia.
Junto con Platón, Aristóteles creó las ramas fundamentales de la filosofía occidental. Esta obra es una exposición ordenada y clara de su pensamiento en cada uno de sus grandes temas.

Comparte este artículo

ARISTÓTELES. Ingemar Düring. UNAM. México, 2005 (1964). Edición y traducción de Bernabé Navarro. 1031 pp.

El filósofo sueco Düring fue uno de los principales estudiosos de Aristóteles; en esta obra erudita expone con detalle el amplio e innovador trabajo del estagirita, en secciones temáticas que trazan la génesis, relaciones, tesis y polémicas sobre cada uno de los aspectos del pensamiento abordados por este pensador universal, fundador de una de las grandes escuelas de la filosofía occidental. La Introducción presenta un esbozo biográfico; su vida se divide en cinco grandes etapas: la infancia en Estagira, los primeros veinte años en la Academia de Platón en Atenas, el exilio en Jonia, el regreso a la Atenas conquistada por Macedonia, y su exilio final en Calcis (Eubea). Vivió entre 384 y 322 a. C.

Aristóteles fue el primero en deslindar e independizar (para bien y para mal) los dominios particulares del saber. El principal hito de su desarrollo fue su oposición a la premisa central de Platón, la teoría de las Ideas, que para él son sólo abstracciones en la mente, e invirtió el orden de precedencia. Los objetos y seres no son “emanaciones” de las Ideas; éstas surgen de la percepción y la razón, del examen de la realidad tal cual se nos ofrece. Así, instaura el método inductivo, que reemplaza parcialmente al deductivo de Platón y sirve como cimiento para que surja la ciencia.

Ingemar Düring (1903-1984), al centro. A su derecha, el rey Gustavo VI Adolfo de Suecia. Wikipedia.

“El origen de las cosas lo explica con ayuda de los dos pares de conceptos hyle-eidos (materia y forma) y dynamis-energeia…De la materia, que existe sólo potencialmente, se genera algo por cuanto la forma es actualizada”. El tiempo es el movimiento constreñido por el espacio. Todos los movimientos están conectados y forman una cadena entre sí. Para Aristóteles, el principio del movimiento (primer motor) es divino, está fuera del proceso natural; el mundo es eterno e inengendrado. El cosmos superior es inmutable; en el mundo sublunar dominan movimiento y cambio. Quizá el principal defecto de su obra, que le impidió evolucionar hacia la ciencia “pura” es su obsesión con el Telos, la idea de que todo en el mundo tiene una finalidad. Esto permitió y estimuló la escolástica, el intento de conciliar el cristianismo con su filosofía, así como la idea de que el hombre es la obra suprema de la naturaleza y su razón de ser. Alma y cuerpo son dos aspectos de un ser viviente; el alma es la entelequia primaria que posee la vida en potencia, pero no es inmortal. El Telos depende de cuatro factores: materia, forma, causa eficiente y fin.

«La Escuela de Atenas», de Rafael Sanzio. www.grupoeducar.cl

El canon aristotélico consiste en 106 escritos (rollos); su obra pasó por un enredado periplo que culminó a fines del primer siglo a. C. con la edición romana de Andrónico de Rodas, quien creó involuntariamente la metafísica al llamar así a un conjunto de textos misceláneos sobre los “primeros principios”. En realidad, el término simplemente se refiere a que esos textos, en su edición, siguen a los referidos a la “física” (ciencias naturales). Es imposible encontrar en Aristóteles un sistema unitario cerrado:  diversos dominios del saber exigen diversos métodos.

Para él, las definiciones son fundamentales; muchos de los conceptos centrales de la filosofía son innovaciones suyas, que incluso seguimos usando en el lenguaje cotidiano (sustancia, accidente, etc.). Pero a diferencia de Platón, los conceptos no son ontológicos, no son un “orden del ser”: sus categorías son herramientas de comprensión, es decir, “univocidad en la determinación, pero arbitrariedad en la designación”. Fundó, entre otras disciplinas, la lógica formal; abordó la retórica, la poesía épica y la tragedia.

Busto con retrato imaginario de Aristóteles. Wikipedia.

La Física y el escrito Lambda de la Metafísica contienen los conceptos fundamentales de su teoría de la naturaleza. Como se ha dicho, todo parte de su oposición a la teoría de las Ideas, entidad innecesaria que no explica el movimiento ni el cambio, los fenómenos básicos de la naturaleza. No existe una ciencia universal, ni separa objetividad y subjetividad: nuestro pensamiento es todo lo que existe, o por lo menos la única vía para concebir lo que percibimos y racionalizamos como existente. Lo importante es utilizar nuestras facultades para explicar la estructura de los procesos naturales y no despreciarlos por una explicación cuasi-religiosa (Ideas).

Sería imposible, en un resumen tan breve, dar una idea de la variedad, profundidad, riqueza y originalidad del pensamiento aristotélico. Superado en algunos ámbitos más que en otros, abordó todo lo que se podía abordar en su tiempo: lógica, física, biología, literatura, política, ética y estética, entre otras muchas disciplinas de las que fue, incluso, fundador. Este extenso, pero jamás árido libro de Düring es una exposición iluminadora, ordenada y coherente de una de las mentes más poderosas de la historia, un hombre casi sin discípulos inmediatos, que vivió una época turbulenta y ejerció una influencia inconmensurable en el desarrollo intelectual de la humanidad.

¿Te gustó el artículo?
Déjame un like
Comentarios del artículo

Un comentario

  1. Felicidades a Memo Maynez por este artículo tan interesante, que en verdad demuestra su gran capacidad para entender y resumir las ideas del libro de Ingemar Düring.
    Muchos saludos

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Sobre el Escritor

Otros artículos