Épica del Siglo XX: Stalingrad, de Vassily Grossman.
Émulo fársico de Napoleón, Hitler olvidó que fue en Rusia donde la suerte le volvió la espalda al emperador. Aquí la historia ínitima y épica de la resistencia del pueblo ruso.
Émulo fársico de Napoleón, Hitler olvidó que fue en Rusia donde la suerte le volvió la espalda al emperador. Aquí la historia ínitima y épica de la resistencia del pueblo ruso.
Marsé es el novelista por excelencia de la Barcelona del franquismo. Esta, una de sus mejores, explora las barreras a la movilidad social, pero es también una gran historia de amor, sin complacencias.
Hace casi cien años, Virginia Woolf inauguró el modernismo en la novela británica, acompañada por el Círculo de Bloomsbury y por T. S. Eliot en la poesía. Tras «Mrs. Dalloway» (1925), en 1927 publicó esta otra que consolidó su posición.
Ha muerto, a los 94 años, Milan Kundera, uno de los más importantes escritores checos. Esta es quizá su novela más conocida.
Décadas antes que en Hispanoamérica, en Haití hubo una guerra de independencia de una violencia sin igual en el continente. En esta primera parte de su Trilogía de Haití, Bell nos cuenta la génesis del estallido.
Las dictaduras y los regímenes totalitarios están de regreso, más allá de Cuba y Corea del Norte. No sabemos aún si llegarán a los niveles de destrucción y locura de Hitler, Stalin o Mao, pero en todo caso vale la pena recordar cómo fueron.
Poco conocida en español, esta novela de uno de los mejores prosistas alemanes muestra todo el poder del realismo, en una historia sobria y melancólica.
Los gatos son atentos observadores, astutos jueces de la conducta humana. A este le toca una familia disfuncional, como a tantos otros, y procede a analizarlos con humor y mala leche.
Hay una fascinación irresistible por los mundos perdidos, desvanecidos suave o abruptamente bajo las olas de la historia. Transilvania es uno de los más mágicos y hermosos, y aquí tenemos el relato de su final. Hay traducción al español.
Jauja existe: en el plano físico, está en los Ander peruanos; en el plano simbólico, no es un paraíso, sino una posibilidad menos remota de lo que se sule creer.